Demasiado cerca,
vos,
corto punzante si descuido
mi latido.
Esos ecos que van muriendo
como sombras de espejismos caminan sin tierra,
carne para el hambre sin
filo.
Vos estás amando
peligrosamente mis extremos
elevados
y lo subterráneo
te aclama diosa si te
pudres.
Todo te ama siendo entero,
y lo soy.
Abre los ojos hacia dentro
y huye pronto,
más y más lejos,
tanto que me encuentres
y me quieras asesinar
despiadadamente.
Ya huelo tus pedazos,
exageradamente hermosa de
revés,
yo te haré dormir sin día
siguiente,
te odio
y te asesino
despiadadamente
con encierros ilusorios,
sin lenguaje ni humedad,
dímelo vos,
¿cómo no saberte mar de
cálida muerte?
si entre las tumbas
un triste sonido llega a ti pidiendo aire,
ese día que a todos
encuentra.
Pay por compartirlo, las letras son tus cómplices, que bueno tener entre mis escritores favoritos a un pana de las cuenquitas... Abrazos.
ResponderEliminarEuge